El pasado 1 de agosto tuvo lugar la 24 subida a Juncalillo (Gran Canaria), donde después de una largo periodo de inactividad retomábamos la competición con la intención de probar nuestra montura e ir cogiendo algo de ritmo de cara al campeonato insular de Lanzarote.
Antes de comenzar la prueba detectamos una pequeña pérdida de agua, que por suerte se pudo solucionar cambiando uno de los manguitos principales de refrigeración, que de no haberse solucionado hubiese comprometido la carrera dada la previsión de altas temperaturas.
Tras las verificaciones se vislumbraba un días muy caluroso, a media mañana la temperatura superaba los 30 grados, lo cual supone un hándicap añadido y que perjudica seriamente la mecánica.
Por otra parte detectamos que la altura unido a las altas temperaturas afecta seriamente a la mecánica, lo que nos hace ser bastante conservadores a la hora de tomar la salida en la pasada de entrenamientos, a pesar de ello y llegando a meta perfectamente, a la hora de regresar para realizar el segunda pasada el coche no quiere arrancar, por lo que decidimos bajar por inercia, hasta que no quedamos atascados en una zona de llano, sin posibilidad de continuar hasta las asistencias para intentar que el coche volvieses a la vida. Tras una larga espera nos recoge la grúa y regresamos a las asistencias, con el tiempo suficiente como para poner el coche de nuevo en marcha y tras dudas en cuanto a salir en la segunda manga, decidimos salir con bastantes precauciones para ver como reaccionaba el vehículo, con la suerte de llegar bien a meta, tanto en esta como en la siguiente pasada, pero sin poder realizar unos tiempos aceptables, optando por conservar la mecánica y disfrutar de la carrera lo máximo posible.
Dar gracias a la afición, también a los organizadores que han sacado adelante la prueba con nota, en un lugar tan estrecho, con bastante fluidez y coordinación, también a la ayuda de las asistencias y otras personas que nos han ayudado a estar ahí, que obviamente es difícil nombrar a todas.
Agradecer el acogimiento de Meleguinas Motorsport, a Aritarime RallyTeam por el seguimiento que nos ha realizado, y también a Automovilismo Canario, y a todas las publicaciones del motor en general.
Finalmente agradecer a mi primo Orlando que no dudó en acompañarme y llevar el coche de asistencia con todos los bártulos a cuestas, que sin su ayuda hubiese sido imposible esta aventura.
Agradecer como no, también a nuestros Sponsor, que sin ellos sería muy difícil estar ahí.
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