El sábado 17 de julio tuvo lugar la VIII Subida a Betancuria en la isla de Fuerteventura, con una nutrida participación de pilotos de otras islas, sobre todo de la isla de Lanzarote, entre los que nos encontrábamos nosotros, con gran ilusión al ser la primera vez que pisábamos tierras majoreras.
El día se presentaba caluroso, lo cual nos hacía presagiar que se pudiera presentar algún tipo de avería mecánica teniendo en cuenta el excesivo calor y la longitud de la prueba que pasaba de largo de los 6 kilómetros de subida, sometiendo a un gran sufrimiento a la mecánica.
Para evitar contratiempos decidimos afrontar la subida con un mapa motor poco agresivo para amortiguar en la medida de lo posible el excesivo calor, que superaba los 30 grados. La prueba comenzada sobre las 12 y media, con una pasada de entreno, que utilizamos para conocer el estado del asfalto, bastante liso y con una temperatura muy alta, lo que hacía que el coche deslizara en exceso, por lo que para las siguientes pasadas realizamos ajustes en la presión de los neumáticos, haciendo que los tiempos fueran mejorando, pero un error de cálculo en la última pasada oficial al no poner gasolina suficiente provocó que en las zonas viradas de la parte final del tramo el la bomba de gasolina se cebara provocando en varias ocasiones que el coche rateara, y nos privara por muy poco de entrar en el Top Ten de la clasificación, quedando finalmente en el puesto número 11 de la clasificación general, puesto que nos satisface enormemente.
Dar gracias a nuestros colaboradores y patrocinadores:
Ayuntamiento de Haría, Construcciones Domingo Betancor, Alojamiento rural Lotus del Mar,
Piensos y Forrajes Tenegüime, Librería Papelería Arrieta, GTT Turbo Parts,
Tenerife Turbo Club y Grúas Mederos.
También agradecer a familia, a la afición que se ha portado de 10, espectacular como a pesar del calor estaban a pie de prueba animando, graciassssssssssssssssss.
Finalmente mencionar la atención recibida por parte de la organización, especialmente a Ernesto Vega que a cada consulta siempre estaba para responder y ayudar, también me gustaría agradecer a Araceli siempre al pie del cañón aguantando nuestras jaquecas con una sonrisa.
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